.... De Autos

Y si. Los que me conocen saben, y despues de un tiempo sin verme, me preguntan si me he comprado un auto.

Lo compré hace unas semanas, luego de idas y vueltas, de mucho buscar por demotores e ir a ver que ya lo habían vendido, fueron 5 oportunidades en las que se me fue de las manos el que yo buscaba.

Muy cerca del ideal de auto que yo apuntaba, apareció este. Y lo vi, el me vió, nos sonreímos, nos abrazamos, y nos pusimos de acuerdo.

Esta es la historia de mi verdolaga y yo.

Pero hay otra historia.

La del sacrificio, la de la lucha, la del esfuerzo compartido, la de las privaciones, los desencuentros y encuentros, la historia que dia a dia mi señora y yo escribimos con nuestro sudor en nuestros respectivos puestos laborales.

Ésa historia, no cabe en ninguna visión, es una realidad que nosotros forzamos con nuestros sueños, nuestros anhelos, nuestras esperanzas, y nuestras ganas de vivir nuestra vida, a nuestro modo, asumiendo las consecuencias de nuestras decisiones, actuando en rigor, y sobre todo viviendo, y haciendo lo que mejor sabemos hacer.

Este logro, es más que un regalo de cumpleaños, para mí, es el premio de haber apostado a ganador a esta vida.

Esta son las fotos: